No os vamos a hablar ni de individuos que son resultado de una única gestación ni de la película de Paco Martínez Soria. Os vamos a hablar de las pocas joyas que puede lucir un caballero: los gemelos. Los gemelos reciben otros nombres como colleras, mancuernas, mancuernillas, yuntas o mancornas. Son pasadores articulados ideados para unir los cuatro puños en que finaliza cada manga de una camisa de puño doble.

Estos pasadores surgen por primera vez en la Historia como cierre para pulseras de cuero en el Antiguo Egipto. Pero tal como los conocemos hoy, surgen a mediados del siglo XVIII.

El uso de los gemelos se puso de moda en la corte del rey Louis XIV de Francia, quien ostentaba toda una colección de “botones de manga” como se los llamaba.

Éstos consistían en dos botones unidos por una corta cadenita que se hacían pasar por los ojales. Eran símbolo de distinción entre los caballeros debido a su alto coste por los materiales en los que estaban realizados. Normalmente los fabricaban por encargo joyeros y orfebres.

Con la Revolución Industrial el uso de los gemelos se popularizó y extendió a todas las clases sociales, debido a la producción en serie y al empleo de nuevos materiales menos costosos que los hizo más económicos y accesibles.

Debido a la aparición de las camisas abotonadas su uso se reservó a eventos importantes y a profesiones como abogados y políticos.

Antes de colocarse unos gemelos debes saber que la manga de la camisa debe sobresalir un poco de la manga de la chaqueta.

A su vez debe complementar el atuendo que portes, prestando atención al color de la camisa, del traje y de la corbata que lleves.

Si tus gemelos son de metal, deberás prestar atención a que sea del mismo metal de los demás complementos que lleves como puede ser el reloj.

Hoy en día hay infinidad de diseños fabricados en diferentes materiales, como todos éstos que os mostramos y que hemos ido podido ir registrando como fotógrafos de bodas. Como podéis ver, en nuestros días existen desde los más clásicos hasta los más innovadores, en metal, oro, plata y hasta en plástico. Cuadrados, redondos, con pedrería y, por qué no, en forma de garras o de mandos de la consola. El abanico de precios y opciones dónde elegir es inmenso.

¿Tienes ya los tuyos? ¿Cuáles serían tus gemelos ideales? O ¿cuáles llevaste en tu boda? Anímate y cuéntanoslo, estamos deseando saberlo y hacerlos protagonistas de las fotografías de tu boda.

Entre tanto esperamos haberos divertido e informado con este pequeño repaso por la Historia y el protocolo 😀